Una palabra tuya
Cubríase el cielo con oscuras nubes aquella madrugada de abril.
Penaba la luna, y en su delirio, lloraba esa lluvia que resbalaba en ti.
Limpiábase el fango, el ruido, la gente… Quedaban desiertas las calles de Paris.
Saltaba mi alma, temblaba mi pecho, buscaban mis besos encontrarte al fin.
Aferré tus manos, me acerqué a tu cuello, aspiré el olor de tu semblante gris
Llegué a tu frente, cerré los ojos, rocé tus labios, besé tu nariz…
Me perdió la noche, en horas eternas, tan dulces, tan ciegas… engaño sutil
Distancia, dijiste, cerraste tus puertas y en tu umbral me encuentro, deshecho al pensar en ti.
2 Comments:
Hay puertas que se vuelven a abrir, y las hay que es mejor dejar cerradas, con llave.
Saludos.
tu lo escribiste???
O: bueno bueno (Y) Saludos!
Publicar un comentario
<< Home