Punto de partida

"Hasta entonces no había tenido el valor suficiente para entrar. Sabía que eso le traería muchos recuerdos e iba a sufrir por ello. Ahora que ya había pasado un tiempo, se veía preparada y dispuesta. Se acercó a la puerta. Estaba dentro de su propia casa, pero ese cuarto había estado siempre prohibido. Bueno, no siempre en realidad. Sólo a partir de... Cerró los ojos intentando no recordarlo. Acercó una mano al pomo y, por fin, abrió la puerta. Nada había cambiado allí dentro, a excepción de una buena capa de polvo por todas partes. Aún así todo seguía tal y como lo dejó aquel día en que se prometió no volver a entrar. Era la única habitación que se había quedado sin amueblar, y sólo contenía varias cajas de cartón. Dentro de esas cajas estaba todo lo que le quedaba de él. Claro que, pensándolo bien, no todo..."
El cuaderno de Bruno, Javier Herce.
Muy, muy, muy sugerente... casi te puedo anticipar que me va a encantar...
Siento no actualizar tan a menudo como quisiera, igual que siento no poder visitaros con detenimiento, pero me faltan horas...
Siento no actualizar tan a menudo como quisiera, igual que siento no poder visitaros con detenimiento, pero me faltan horas...